Casper Ruud cerró la temporada fuera del Top 10, pero lo que ocurrió después encendió las alarmas del circuito. Lejos de desaparecer en silencio, el noruego lanzó un mensaje claro: no ha dicho su última palabra.

Tras conquistar el Stockholm Open en un cierre de año explosivo —un título que lo dejó a las puertas de las ATP Finals como suplente— Ruud terminó como número 11 del mundo, a menos de 200 puntos del Top 10 que hoy ocupa Jack Draper. Para muchos, un simple dato. Para Ruud, una provocación. Y su respuesta llegó lejos de los focos… pero no del radar.
En Oslo, en una pista discreta que suele albergar torneos Challenger, Ruud fue captado entrenando con una figura emergente que empieza a generar murmullos peligrosos: Coleman Wong, la gran revelación salida de la Rafa Nadal Academy. Las imágenes, compartidas por el propio Wong en Instagram, mostraron una intensidad poco habitual para una “simple sesión de preparación”. Ritmo alto, miradas serias y una conexión que sorprendió incluso a quienes estaban presentes.

Wong, estrella en ascenso de Hong Kong, viene de una temporada de ruptura en el ATP Tour y muchos lo señalan como el próximo nombre inesperado en sacudir el ranking. Que Ruud haya decidido iniciar su pretemporada junto a él no parece casualidad. Algunos ya hablan de una alianza estratégica: experiencia y hambre frente a talento joven y ambición desbordada.
Mientras el circuito cree que Ruud quedó atrás, él se prepara en silencio. Y si algo ha demostrado la historia del tenis, es que cuando los entrenamientos empiezan a levantar rumores… la tormenta suele llegar en enero 🎾🔥