Durante 36 años, la montaña habĂa sido acusada, temida y venerada. Una joven pareja desapareciĂł allĂ sin dejar rastro, tragada —segĂşn decĂa la leyenda local— por “el guardián de hielo”, un espĂritu que se cobraba almas para mantener vivo el glaciar. Nadie lo creĂa… hasta ahora.
Cada aniversario, los familiares dejaban flores en la base de la montaña, pero siempre ocurrĂa algo extraño: las flores amanecĂan congeladas en formas imposibles, como esculturas. Era como si alguien… o algo… las hubiera tocado.

Pero este año, la tierra tembló. El glaciar retrocedió de forma abrupta, revelando una cueva que no figuraba en ningún mapa. Y dentro, los rescatistas encontraron lo inimaginable:
Los cuerpos de la pareja, perfectamente conservados, con expresiones de terror… y con las manos entrelazadas.
Pero lo más perturbador fue lo que encontraron bajo ellos:
un cĂrculo tallado en el hielo, sĂmbolos desconocidos y un extraño objeto metálico que no pertenecĂa a ninguna Ă©poca.
Los expertos hablan de un “fenĂłmeno atmosfĂ©rico inexplicable”. Los ancianos del pueblo dicen que es la prueba de la leyenda. Los cientĂficos, en privado, admiten que las marcas alrededor de los cuerpos no pudieron haber sido hechas por humanos.

Se rumorea que las grabaciones hechas en la cueva han sido clasificadas. Un rescatista asegurĂł haber oĂdo un sonido “como un susurro, pero metálico, como si el hielo respirara”.
La montaña, después de 36 años, finalmente contó la verdad…
pero también desató una nueva pregunta aterradora:
ÂżLa pareja fue vĂctima de un accidente… o de algo que llevaba siglos esperando bajo el hielo?
Y lo más escalofriante:
Según imágenes satelitales recientes, el glaciar ha empezado a abrir una segunda grieta.